La temporada de bolos emerge brevemente dentro del parón invernal
Dentro del parón invernal, la temporada de bolos emerge brevemente para celebrar en la capital burgalesa la final del trofeo San Lesmes 2025 que anualmente organiza el club de bolos del Plantío en sus instalaciones de la calle Villafranca, volviendo a parar de nuevo hasta el mes de mayo, cuando con la mejoría del tiempo, la temporada comenzará con más fuerza con el inicio de la liga.
La final de este torneo la jugaron los diez mejores jugadores de la clasificación previa, lanzando dos bolas a cada juego. Tras una primera ronda, los cinco jugadores con más bolos pasarían a la ronda final con otras diez bolas para cada jugador, resultando vencedor el que sumaría más bolos en el total de las rondas de la final.
Comenzaron a la mano, destacando con 60 bolos Moisés Castañeda, Fidel Mata y Diego Báscones cogiendo una buena renta que les valdría para acceder a la siguiente ronda. De hecho, Fidel falló con estrépito en su primera bola al conseguir solamente 3 bolos que supo remediar con 40 en la segunda, siendo el único jugador con un pleno, por lo que se quedaba líder en solitario.
Otros 60 bolos a la diabla para Diego le permitirían acercarse a 3 bolos de Fidel, mientras que Juan Carlos del Pino, que también alcanzó los 60 bolos le acercaban a la ronda final. Al castro diabla solo hubo otro pleno para José Félix González, que a pesar de sus 50 bolos en este juego y a la diabla, su mal comienzo le dejó muy difícil el pase a la final. A pasabolo fue Roberto Heras el más destacado con sendas bolas de 51 y 71 bolos respectivamente, pero que tampoco le valió para mucho. Pasaron a la final Diego con 264 bolos, Moisés 262, Juan Carlos 253, Fidel 243 y Ángel Ordóñez con 241.
Diego Bascones conquista el torneo burgalés
En la final, las diferencias eran muy cortas entre los cinco jugadores, por lo que cualquier error sería definitivo. Siguiendo el orden de juego, a la mano fue Diego con dos plenos el que se puso en cabeza con una buena ventaja. Después del castro mano, Fidel le recortó 29 bolos en lo que parecía que el título se lo iban a jugar entre los dos.
Ángel llegó a los 60 bolos a la diabla, restando Fidel 3 bolos más a Diego. La emoción llegaba con el castro diabla ya que Fidel iba a conseguir 50 bolos, que unidos al pinchazo de Diego con 13, dejaba a este en cabeza por tan solo un bolo de diferencia que se iba a resolver a pasabolo. Y en este juego, el que erró en su segundo lanzamiento fue Fidel que hizo 31 bolos.
Posteriormente lanzaba Diego consiguiendo 60 bolos de un salte y 40 en la segunda bola que le dieron el título por 9 bolos de diferencia en una apretada final. La tercera plaza fue a parar a Moisés por otro bolo de diferencia sobre Juan Carlos.
La clasificación final fue la siguiente:
1º Diego Báscones de Palazuelos de la Sierra con 518 bolos
2º Fidel Mata de Villamudria con 509
3º Moisés Castañeda de Sotragero con 489
4º Juan Carlos del Pino de Cubillo del Campo con 488
5º Ángel Ordóñez de Los Ausines con 416
6º Félix Vicario de Hontoria de la Cantera 232
7º Roberto Heras de Quintanalara con 210
8º Ricardo Barbero de Palazuelos de la Sierra con 190
9º José Félix González de Quintanilla Vivar con 180
10º Domingo Revilla de Castrillo del Val con 143












